El espacio cívico polivalente y la inclusión social en el parque Reducto #2 de la urbanización San Antonio - distrito de Miraflores, Lima 2020

Abstract

En las últimas décadas la importancia que se le ha asignado al desarrollo de actividades para la interacción, integración, recreación y esparcimiento como parte del proceso físico, social y emocional se ha incrementado considerablemente, es por ello que durante el siglo XX los arquitectos comenzaron asociar las necesidades fundamentales de las personas desde un marco interno de una edificación a la ciudad , tal es el caso del arquitecto Mies Van Der Rohe el cual respaldando su teoría en la forma y función menciona que, se puede obtener una mejor concepción de una arquitectura teniendo espacios que jueguen con las luces, sombras, mobiliarios, espacios y diferentes funciones que puedan generase en un mismo espacio, denominándolos espacios cívicos polivalentes. En diferentes partes del mundo se atraviesa situaciones similares en cuanto a la búsqueda de un espacio de encuentro, cívicos idóneo que sean polivalentes, a pesar de la presencia de diferentes espacios en una ciudad, muchas veces estos no generan una satisfacción en cuanto a las necesidades reales de recreación, en contraparte generan un aislamiento urbano-social, ya que genera una falta de participación del ciudadano con su entorno, asimismo con la vida social y cultural del lugar. De acuerdo a la situación mencionada, se comenzó a tomar en cuenta otras alternativas de inclusión social, las cuales son planteadas enfocando a los espacios cívicos como ejes multifuncionales y adaptables, tomando en cuenta la flexibilidad o en otras palabras polivalentes, podemos ver que muchos lugares han cambiado su uso y se han establecido mercados temporales de alimentos en espacios tales como áreas de estacionamiento para descongestionar los mercados existentes, espacios de juegos didácticos y ambientes para alguna ayuda social, etc., teniendo como resultado asimismo un espacio cívico polivalente. Dichas propuestas de espacios polivalentes se vienen desarrollando en la actualidad en diferentes puntos de cada ciudad en el mundo, en donde el ciudadano participa e interactúa en estos espacios de manera híbrida (física/digital), sea de forma individual o colectiva, dando como resultado una inclusión social. Un beneficio importante fue que la Organización de Naciones Unidas el 11 de junio del 2011 declaró que el internet es un derecho humano y como tal tenía que estar en beneficio del ciudadano para su empoderamiento y competitividad a nivel glocal. Partiendo de este punto, muchas aplicaciones (videojuegos) comenzaron a tomar como referencia los espacios cívicos polivalentes como centro de interacción, incluyendo a distintas personas dentro de un lugar común. En España a mediados de los años 80 los espacios cívicos polivalentes comenzaron a ser fundamental dentro de la ciudad debido a la necesidad por la descentralización de los servicios socioculturales, dando respuesta ante un aumento poblacional. Actualmente los resultados se reflejan en el desarrollo de una participación y posibilidad de organización que fomenta un tejido asociativo en un lugar, esto a su vez es denominada como habilidad social que se manifiesta de manera directa en un espacio polivalente, es así como múltiples funciones aparecen facilitando la compactación de servicios. Desde esta perspectiva, el espacio cívico polivalente interactúa con el usuario promoviendo sus habilidades intelectuales y/o sociales, conllevando a una interacción inteligente colectiva en un lugar para el encuentro y la participación equitativa, sin ningún tipo de exclusión. Llega a ser un espacio al disfrute de todos y no de unos cuantos (lugareños), principalmente para las personas más vulnerables (niños, ancianos, personas con discapacidad física o sensorial). Y con ello, demarcamos y reafirmamos el término de espacio cívico en donde las personas de distintas procedencias toman por asalto el espacio público como aquel lugar de uso y no de propiedad sin distinción. Esto solo para satisfacer sus necesidades de libertad de expresión, asociación, reunión pacífica, determinando una verdadera inclusión social por medio de la dignidad de la persona. En contra parte no distinta es la historia en América Latina ya que en Colombia­ Medellín en el 2017 los espacios cívicos polivalentes sufren de escasez espacial, integración y seguridad debido a la ubicación de estos equipamientos urbanos. Los cambios sociales forman parte de este problema debido al interés social con el que se ve un espacio, la sociedad interactúa con ello de manera forzada. Hoy en día, las implementaciones digitales han abierto una puerta que genera una adaptación de las personas con el lugar por medio de aplicativos o dispositivos que entrelazan esta comunión y generan una inclusión social dentro del espacio cívico polivalente.