Formación técnica de recursos humanos en la industria gráfica

Abstract

El presente informe está dirigido a un sector industrial que, si bien ocupa una proporción pequeña de la mano de obra peruana ha experimentado en la última década una serie de transformaciones que la convierten en un interesante caso de inversión exportadora. Es en el marco de esta transformación de la industria gráfica, que se detalla las principales características de sus procesos de formación de recursos humanos. Las empresas modernas han introducido cambios tecnológicos que han modificado las características de la actividad gráfica: la introducción de la computación en las tareas de diseño ha realzado la importancia estratégica de las actividades de preprensa, en las que se han sustituido trabajadores tradicionales por empleados más jóvenes, con mayor formación básica, específica y con menor experiencia laboral y que en un tiempo determinado serán debidamente capacitados. En las actividades de las áreas de prensa (rotativas y planas) se han añadido tecnología básica, mejoras en el control numérico y el manejo informático, generando nuevos requerimientos que entran en discusión con las habilidades tradicionales del oficio gráfico. En general, las innovaciones han ido en dirección de devaluar el status de los trabajadores antiguos, aunque se ha comprobado que numerosas empresas no pueden prescindir de trabajadores que han acumulado un capital de conocimientos (maestros) que los hace imprescindibles a la hora de poner en marcha la producción y, fundamentalmente, en la solución de problemas imprevistos. La importancia de estos maestros evidencia una característica del sector gráfico: su carácter todavía artesanal, a pesar de la alta tecnificación reciente. Por ello mismo, en todos los casos estudiados resulta fundamental, para trabajadores con educación formal o sin ella, un período de aprendizaje de hasta un año en la línea de producción. El manejo financiero en la industria gráfica es un factor importante para determinar las características de la reorganización y adaptación de cada empresa a las cambiantes circunstancias. Se puede identificar dos estilos importantes: el primero es el de las que hicieron expansiones cuidadosas apoyadas por utilidades; el otro es el de las que no fueron capaces de controlar todas las variables de un proceso de expansión muy complejo y cuyos propietarios debieron finalmente vender la empresa o, al menos, abandonar su dirección. Las innovaciones tecnológicas que se introducen en todas las empresas generan una estructura caracterizada por un aparato de gestión más complejo, diversificado y con nuevas funciones. La inversión para mejoramiento tecnológico genera también nuevas demandas por recursos humanos de alto nivel de formación, especialmente en las áreas de gestión y diseño; y mano de obra con un nivel de conocimientos técnico en las áreas de producción.